En nuestro aniversario N°45 entrevistamos al fundador de #Polimin, Carlos Stipicic Bon
¿Qué visión lo impulsó a fundar #Polimin hace 45 años? ¿Cuáles fueron los desafíos en esos primeros días y cómo los superó? “Que nuestra principal línea de negocios, la separación y concentración magnética, no eran cubiertas en el país en forma global y representaba un nicho a desarrollar”.
Si pudiera volver atrás, ¿qué consejo clave se daría a sí mismo al inicio de este proyecto? “Era soltero, joven, con harto entusiasmo y me divertía mucho con todo lo que hacía y desarrollaba. Creo que hubiera hecho lo mismo”.
En 45 años, la industria ha ido cambiando. ¿Cuáles han sido los momentos o decisiones más cruciales que permitieron a #Polimin adaptarse y crecer en este tiempo? “Cuando me di cuenta que tenía que agregarle valor a lo que hacíamos y no sólo ser representante de Eriez, la excelente empresa americana precursora mundial de estos equipos y aplicaciones. Instalé una maestranza y comencé a fabricar sus equipos bajo licencia y equipos propios de otros rubros. Posteriormente, haber delegado la completa marcha del negocio a mi hijo Carlos y la inclusión de mi hija Sofía, fue crucial para la transformación a lo digital de la empresa y lograr todas las certificaciones que tenemos”.
¿Cómo describiría la cultura organizacional que ha cultivado en #Polimin a lo largo de estas décadas? ¿Qué valores considera intransables? “La corrección en todo ámbito, teniendo como piso y techo lo legal. No evadir ni eludir impuestos. No imputar gastos propios o del personal a la contabilidad de la empresa. Cuando los propietarios de la empresa son correctos y los colaboradores lo notan, todos tienden a la máxima corrección y respeto a la organización y la comunidad”.
De todos los logros de #Polimin, ¿cuáles lo llenan de orgullo y por qué? “Es que cumpla 45 años con todo al día, sin deudas, dando empleo a más de 60 jefes de familia, sin haber tenido problemas laborales, ni con la comunidad”.
¿Hay algún proyecto o innovación específica que considere emblemática del espíritu de #Polimin? “Sí. El Trommel Magnético. Un invento en conjunto con Eriez que fue inmediatamente llevado a cabo, un éxito comercial en la minería chilena y mundial, además de muchos otros desarrollos de aplicaciones que nos han transformado en líderes del mercado chileno y un referente importante para otros mercados”.
Tras 45 años, ¿cuáles son los próximos grandes desafíos y oportunidades que vislumbra para #Polimin? “Estamos desarrollando otros mercados latinoamericanos y cada vez ser más especialistas en los rubros que cubrimos hoy, sin diversificarnos demasiado”.
¿Cómo ve a #Polimin en los próximos años, y qué mensaje le gustaría enviar a los colaboradores y clientes que han sido parte de esta trayectoria? “Lo veo próspero, muy bien administrado y cada vez en más concordancia con la sociedad y el medio ambiente”.
